Mensajes de diversas orígenes
jueves, 15 de mayo de 2025
¡Rezad, hijitos, rezad! Que vuestras oraciones ablanden vuestros corazones
Mensaje de Nuestra Señora, María Madre de la Caridad Cristiana a Chantal Magby en Abijan, Costa de Marfil, el 9 de mayo de 2025
Hijitos, aquí estoy ante vosotros llena de Mi Misericordia, para usarla con los que son dignos de misericordia.
Si queréis Mi Misericordia, sólo tenéis que rezar para convertiros y arrepentiros.
Recordad vuestro pasado, hijos Míos, y reparad todos vuestros pecados.
Vivid los mandamientos, observadlos, sed fieles a sus leyes.
Porque el que no sea fiel a estas Leyes no comerá del maná del Cielo.
Pero a quien sea fiel, Mi Hijo Jesús le tomará en Sus brazos, le hará descansar sobre Su pecho y le hará sentarse a Su mesa.
¡Rezad, hijitos, rezad!
Que vuestras oraciones ablanden vuestros corazones.
Mi Hijo y Yo queremos corazones ardientes de amor Divino.
Vuestro país, vuestro continente, el mundo entero están cayendo cada vez más en manos de los condenados, porque los hombres ya no se aman, la mayoría de ellos se creen superiores a los demás, han huido de la mirada de Dios, cada acción que realizan se ha convertido para ellos en rutina, han olvidado la grandeza del Creador.
Por eso te pido: mantente humilde, aléjate de los que te dan palmaditas en la espalda, de los que te adulan, de los que te dan títulos y honores.
Sed humildes y sencillos de corazón, y haced que vuestros corazones se parezcan al corazón de Mi Hijo Jesucristo, vuestro Señor.
Este es Mi mensaje para vosotros esta noche.
Sed bendecidos por haber venido a Mí en este lugar santo, tan ignorado por muchos.
Id a llevar la palabra de que Yo estoy aquí, Yo, María Madre de la Caridad Cristiana, la Madre de vuestro Señor, que os espera con los brazos abiertos.
Llevarás la palabra de que Mi rosa está en Usa, para que esta rosa que Yo he plantado atraiga por fin a las almas. Llevarás la palabra de que Mis rosas te esperan y que tras ellas se encuentran las puertas de la vida para cada habitante de la tierra.
Llevaréis la palabra de que Yo, María Madre de la Caridad Cristiana, tengo las llaves de todas estas puertas, y que sólo de ellas depende que Yo las abra para llevarlas a Mi Hijo, perdonándoles sus pecados.
A vosotros, Mis dos hijos que partiréis conmigo y con Mi hija hacia Camerún, os pido que estéis constantemente a su lado, porque la batalla que librará allí en Mi Nombre podría tener graves consecuencias.
Por eso, con ella, no salgáis nunca del centro donde estaréis sin haber hecho juntos vuestro camino espiritual diario.
Y a vosotros, el equipo de intercesión aquí en el oratorio, os pido que no faltéis a vuestro papel en esta difícil misión.
Os amo y os bendigo.
María Madre de la Caridad Cristiana.
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