domingo, 24 de marzo de 2002

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Maceió, Alagoas, Brasil

¡La paz de Jesús esté con todos ustedes!

Queridos hijos, hoy los bendigo y derramo las gracias que el Señor me permite conceder a cada uno de ustedes. No se rindan al caminar hacia el Señor. Entiendan lo importantes que son a los ojos de Dios. Sus oraciones son preciosas a mis ojos.

Cuando oran, la paz de Dios desciende sobre ustedes y Su Bendita Presencia los rodea. No dejen de lado la oración, sino esfuércense por orar y ser una oración diaria a Dios.

¡Qué feliz estoy con la oración de los niños! Sus oraciones son muy valiosas para mí. ¡Ay de los hombres sin las oraciones de los niños! Oren también con estos pequeños míos y enseñen a los niños a rezar el rosario, y entonces las gracias de Dios serán derramadas en abundancia sobre ustedes, sus familias y todo el mundo. Bendigo a cada uno de manera particular y los encomiendo a mi Inmaculado Corazón. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. ¡Amén!