Queridos hijos, necesito a cada uno de ustedes. Deseo que se unan y sean uno en corazón.
¿Por qué no me escuchan? Cuando les pido que se unan en oración, es porque sus oraciones juntos son más fuertes y llegan más rápido a mi Inmaculado Corazón.
Muchos no escuchan lo que les pido. ¡El tiempo de Gracia se está acabando! Entonces, no servirá de nada llorar. No podré hacer nada. Por lo tanto, les pido que recen el Santo Rosario todos los días, con amor y con el corazón.
Recen. Recen. Recen. Los amo a cada uno de ustedes".