domingo, 5 de octubre de 2025

Estás en la Gran Purificación

Mensaje de la Santísima Virgen María a Luz de María el 3 de octubre de 2025

Queridos hijos de Mi Inmaculado Corazón:

MI DIVINO HIJO OS REDIMIÓ DEL PECADO (Cf. Mt. 20:28; Ef. 1:7; Tit. 2:14) PARA QUE ALCANCÉIS LA VIDA ETERNA.

Os llamo a ser constantes, a permanecer firmes sin vacilar en vuestros pasos, y para ello es necesario cumplir los Mandamientos y los Sacramentos, rezar el Santo Rosario todos los días, participando de cada uno de los Misterios y otras oraciones piadosas, ayunar y participar en la Celebración Eucarística.

Queridos pequeños:

OS LLAMO A ABRIR VUESTROS OJOS ESPIRITUALES (Cf. Ef. 1:18; II Cor. 4:18); solo así podréis ver más allá, en las profundidades, donde Mi Divino Hijo desea que miréis para entrar en los signos y señales de este momento y no pasarlos por alto como algo sin importancia.

ESTÁS EN LA GRAN PURIFICACIÓN , dando pasos dentro de ella, resultado de la desobediencia de Mis hijos, que caen cada día en el grave pecado de negar que son hijos de Mi Divino Hijo (Cf. Jn. 1:11-12; I Jn. 3:1-3).

Los elementos se imponen ante vosotros, queridos hijos. La tierra, el agua, el fuego y el aire están cargados de electricidad, ante lo cual la naturaleza os sorprenderá. Sufrís por el sol y sus constantes emanaciones de viento solar hacia la Tierra, que aumenta hasta que la humanidad se encuentre sin los avances que ha logrado, y vendrá la oscuridad con poco tiempo para prepararse.

Pequeños, entended que la Tierra está afectada por estas emisiones solares: los terremotos están acelerando y el suelo tiembla fuertemente en algunos países y con menos fuerza en otros.

Rezad, pequeños, rezad por todo lo que recae sobre la humanidad para que permanezcáis fieles.

Rezad, pequeños, rezad por cada país de la Tierra, todo será purificado.

Rezad, pequeños, rezad, la enfermedad se está extendiendo rápidamente por toda la Tierra y el silencio prevalece una vez más.

Rezad, pequeños, rezad, la oscuridad viene a la Tierra.

Pequeños, invocad a Mi Divino Hijo, no debéis temer porque la salvación está ante vosotros, ante Mis hijos que buscan a Mi Divino Hijo en medio de todo lo que sucede.

NO TEMÁIS!

YO, MADRE DE LA HUMANIDAD, TE TENGO EN MIS MANOS.

Te bendigo,

Mamá María

AVE MARÍA PURÍSIMA, CONCEBIDA SIN PECADO

AVE MARÍA PURÍSIMA, CONCEBIDA SIN PECADO

AVE MARÍA PURÍSIMA, CONCEBIDA SIN PECADO

COMENTARIO DE LUZ DE MARÍA

Hermanos y hermanas, dado lo que estamos experimentando como humanidad, no solo por causa de la naturaleza, sino también del hombre mismo, somos llamados a mirar en un acto consciente donde el ser humano mira voluntariamente de una manera penetrante y espiritual.

Porque “ver,” según me dice Nuestra Madre, es un acto deliberado de dirigir la mirada adonde uno quiera sin necesidad de quererlo o no, sin propósito de escudriñar, de penetrar lo que está frente a nosotros.

Somos llamados a mantener la fe porque no solo enfrentamos pruebas de orden natural o causadas por el hombre, como guerras o armas letales, sino que también sufriremos como Cuerpo Místico ante las pruebas de nuestra Iglesia.

Hermanos y hermanas, Nuestra Bendita Madre mantiene viva nuestra esperanza como Madre de la Humanidad.

Amén.