lunes, 18 de enero de 2010

Celebración de la Cátedra de Pedro en Roma.

El Padre Celestial habla después de la Santa Misa Tridentina Sacrificial en la capilla de la casa en Göttingen a través de Su instrumento e hija Anne.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. Grandes multitudes de ángeles se reunieron alrededor del tabernáculo durante el Santo Banquete Sacrificial Tridentino y estuvieron presentes en todo el espacio sagrado. La imagen de Dios Padre brilló con un resplandor dorado y un rayo rojo oscuro emanó del corazón del Padre Celestial. La Madre de Dios, el Niño Jesús y San José también estaban bañados en oro claro. El Jesulein en el ramo navideño brillaba especialmente.

El Padre Celestial ahora habla: Yo, el Padre Celestial, hablo ahora en este momento a través de Mi instrumento obediente, humilde y voluntario e hija Anne. Ella yace en Mi voluntad y solo habla palabras que provienen de Mí.

Mi pequeño rebaño amado, Mis creyentes amados, Mi Santo Padre amado, Yo, el Padre Celestial, quiero anunciarles a ustedes, Mis creyentes amados, que Mi Santo Padre, el Vicario de Cristo en la tierra, ya no está en la verdad. Yo mismo lo elegí y lo llamé a proclamar Mi palabra en todo el mundo y también a vivirla.

Mis creyentes amados, cuánto deben sufrir por su debilidad. Él se da por vencido porque la Iglesia Católica está en total destrucción, pero él ha contribuido a ella.

Mis fieles amados, cuánto le dolió Mi corazón cuando un Cardenal pisó el Cuerpo de Mi Hijo Jesús Cristo varias veces. Qué difícil fue para Mí tener que soportar esto y observar. Qué difícil fue para Mí cuando este Arzobispo negó el sacrificio de Mi Hijo Jesús Cristo en la cruz.

¿Mi Santo Padre no vio esto también? ¿No fue posible suspender a estos dos pastores superiores? ¿No fue posible? ¿Tuviste que observar, Mi amado Santo Padre, Vicario de Jesucristo aquí en la tierra? ¿Podías observarlo sin cambiarlo? Todavía no te arrepientes de entrar en una mezquita, una mezquita musulmana. ¿No sabes lo que eso significa para la Iglesia Católica? ¿No sabes lo que significa inaugurar un Centro Interreligioso en Fátima? ¿No lo hiciste tú mismo? ¿Ni siquiera te sentiste apenado por hacerlo sin intentar evitarlo?

Sí, Mi amado Vicario de Jesucristo aquí en la tierra, es amargo para ti ver a la Iglesia Católica en destrucción. ¿Puedes detener esto? ¿No eres Mi representante en la tierra, el representante de Jesucristo, que debe dirigir la iglesia universal y dirigir el pequeño barco en la dirección correcta? ¿Has intentado hacerlo? ¿Cuántas veces te he pedido que escuches Mis mensajes? Te han sido enviados. Sabes sobre Mi mensajera que habla la verdad y repite Mis palabras y no se ve a sí misma. Ha aceptado una gran expiación por ti hoy, porque persistes en la falsedad.

Hoy celebras la fiesta de la Cátedra de Pedro. Tú, Mi amado Santo Padre, has recibido el poder de las llaves con esta fiesta. ¿Estás siguiendo esto? No. Estás contribuyendo a la continua destrucción de Mi Santa Iglesia Católica y Apostólica y llevándola a la ruina.

Mis fieles, ¿no pudo el Santo Padre evitar que este Vaticano II todavía se viva? ¿No pudo evitar después del Motu Proprio que solo se celebre la Santa Misa Tridentina Sacrificial? ¿No es este solo el banquete sacrificial de Mi Hijo Jesucristo? ¿Por qué contribuye a esto celebrando él mismo la comida modernista? Esto va por todo el mundo. ¿No eres también responsable de Mi Iglesia Católica, amado Santo Padre?

Mis creyentes, y ustedes observan. Todavía dicen: Debemos obedecer a este Santo Padre. ¿Este Santo Padre también muestra obediencia a Mí? ¿No contribuye a seguir destruyendo esta iglesia mundial, la Iglesia Católica, que Mi Hijo Jesucristo instituyó con Su sangre? Sí, Mis amados creyentes, ustedes también deben ahora reconocer que él no vive la verdad. Oren, sacrifiquen y expíen, para que la Nueva Iglesia pronto pueda surgir en todo su esplendor y gloria.

Pero antes de eso, sucederá mucho, Mis creyentes. Manténganse alejados de estas iglesias modernistas. Salgan y vayan a sus hogares y oren fervientemente e inclúyanse en la Santa Misa Sacrificial de Mi Hijo Jesucristo, que se celebra en Göttingen diariamente a las 10:00 a.m. Tienen la oportunidad, Mis amados, porque es Mi verdadero banquete sacrificial, el banquete sacrificial de Mi Hijo. ¡Esta es la verdad completa! Mi amada pequeña mensajera Anne lucha por esta verdad. Ella lucha y me ofrece su vida por esta verdad. Por esto te agradezco, Mi amada hija.

Ustedes también, Mi pequeño rebaño amado, ¡agárrense! Perseveren en la verdad y den testimonio de Mí, el Padre Celestial, completamente para que yo tenga alegría en ustedes y ustedes me complazcan! Y así ahora su Padre Celestial con todos los ángeles y santos los bendice, especialmente a su amada Madre de Dios, al pequeño niño Jesús, San José, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén. ¡Vivan el amor! ¡Estén vigilantes y perseveren! Amén.