jueves, 19 de marzo de 2009

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

San José, en esta noche, apareció sosteniendo al Niño Jesús en sus brazos. La Virgen estaba a su derecha. Los tres vestidos de oro, como se representa en la imagen de los Tres Corazones. Sentí una gran alegría en mi corazón. Es imposible describir lo hermosos que son los tres. Solo verlos te hace querer dejar este mundo y unirte a ellos en el cielo. Podría intentar explicar, buscar tantas palabras para contarle a la gente cómo son, pero no hay palabras que puedan explicar cómo es la belleza celestial de Jesús, María y José y el gran amor que Él tiene por nosotros.

Paz de nuestros tres Sagrados Corazones para todos ustedes!

Mis hijos, oren por el mundo. El mundo está enfermo por tantos pecados que cometen los hombres contra Dios. Si quieren pertenecer a Dios, abandonen su vida de pecado. Si quieren honrar mi Corazón, sean obedientes a Jesús y amen a mi Esposa María Santísima. Sean fieles en su camino de conversión. No se dejen llevar por las fuertes aguas de la vida cuando les lleguen las pruebas, sino permanezcan firmes y fieles al Señor. Vean cuánto tuve que sufrir junto con mi Hijo Jesús y mi Esposa María, pero no desesperé, no perdí mi fe y esperanza; confié en la misericordia y ayuda del Señor.

Hoy, cuántos son aquellos que inmediatamente traicionan y abandonan al Señor ante la más leve prueba. Actúan de esta manera porque nunca le han pertenecido de corazón, porque nunca han sido obedientes a Él, nunca han acogido Su palabra y la han vivido con amor.

Sean de Dios, no con palabras, sino con su vida y con todo su ser. Estoy aquí para ayudarles. Oren, oren, oren y Dios tendrá misericordia de ustedes y de sus familias. Oren hoy de manera especial por la Iglesia y el Papa. Oren y sean hijos de Dios, obedeciendo a Su Santa Iglesia y siendo aquellos que la defienden con amor. Paz para ustedes. Los bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!