sábado, 9 de junio de 2012

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber en Gorlago, BG, Italia

Hoy Jesús apareció, con Nuestra Señora y San José. Los tres vestidos de blanco. En esta noche fue Jesús quien nos dio el mensaje:

¡Mi paz sea con vosotros!

Soy Paz y Amor. Vengo del cielo con mi Santísima Madre y mi Padre Virgen José para bendeciros y aliviaros en vuestro dolor. ¿No tenéis la fuerza para superar vuestras pruebas? Venid, venid a mis brazos, y os daré la fuerza que necesitáis.

Hijos, os bendigo con todo mi amor, pues mi amor transforma vuestras vidas. Permaneced en mi amor para que podáis dar fruto en abundancia. Llevad mi paz a vuestros hermanos. Llevad mi luz, testimoniando todo lo que mi Madre ya os ha comunicado en sus muchos mensajes.

Los hombres son sordos y desobedientes, pero vosotros, apresuraos, intentad cambiar vuestros corazones, liberándoos del pecado, porque aquel que desea permanecer en el pecado y lejos de mi Corazón no tendrá parte en la gloria de mi Reino.

Soy misericordioso y manso como un cordero, pero también soy justo, y mi bendición va de generación en generación a aquellos que verdaderamente lo merecen y saben glorificar el Santo Nombre de Dios.

Abrid vuestros corazones. No seáis duros de corazón, permitiendo que la razón os domine, sino sed hombres y mujeres de fe, permitiendo que la acción del Espíritu Santo actúe en vosotros. Orad, orad el rosario a mi Santísima Madre todos los días, pues el rosario obtendrá para el mundo la victoria contra la oscuridad de Satanás.

Mi Madre a menudo viene del cielo al mundo, constantemente suplicándome por vosotros, porque quiere ayudaros, pero muchos rechazan su ayuda maternal.

¡Ay de aquellos que desprecien esta ayuda, tan grande y tan santa! Orad, orad, para que seáis sanados de la ceguera espiritual que os rodea y os afecta. Tened fe y creed sin dudar nunca, porque las grandes gracias que daré solo a aquellos que tienen fe. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. ¡Amén!

Jesús, Nuestra Señora y San José aparecieron sobre los tres jarrones que estaban llenos de muchas rosas y flores. Jugaron con sus pies encima de estos pétalos de rosa.