Queridos hijos, ¡os pido que os convirtáis sin demora! No puedo privaros de vuestra libertad, DIOS os creó libres, y libres os he dejado.
¡Un gran dolor puede venir a la tierra!
El Espíritu Santo no es amado; el NOMBRE de Jesús es despreciado, y cada día aumentan los crímenes y la violencia.
Esta PURIFICACIÓN es inevitable.
Lo único que podemos hacer es rezar mucho juntos, pero... ¡no hay necesidad de tener miedo! ¡Estoy aquí! Aquellos a quienes guardo conmigo nunca serán alcanzados por nada malo.
¡Estoy aquí! Permanezcan en Paz".