viernes, 24 de abril de 2009

Viernes, 24 de abril de 2009

Jesús dijo: “Mi gente, en la primera lectura de hoy tienen una declaración poderosa hecha por Gamaliel en defensa de Mis apóstoles: (Hechos 4:38,39) ‘Así que ahora os digo, apartaos de estos hombres y dejadlos en paz. Porque si este plan o esta obra es de hombres, se derrumbará; pero si es de Dios, no podréis destruirla. De otro modo, quizá os encontréis luchando incluso contra Dios.’ Esto fue, de hecho, el caso, pues he protegido a Mi Iglesia de todo tipo de persecución, y continuaré protegiéndola hasta que regrese victorioso sobre el mal. Lo mismo puede decirse de todos los profetas que he enviado a lo largo de los años. Algunos de ellos han sido asesinados o torturados, pero de hecho entregaron Mi Palabra que era necesaria para advertir al pueblo de sus pecados y la necesidad de arrepentirse. Incluso hoy les envío profetas que deben discernir por la verdad, y escuchar sus advertencias de preparación para la próxima tribulación. A la gente no le gusta que la repuyan por sus malas acciones, pero la verdad siempre saldrá a la luz a pesar de intentar silenciar a Mis profetas. Escuchen las palabras de Mis profetas y atiendan sus advertencias para arrepentirse y salvarse. Su tiempo para arrepentirse es corto antes de que vean un mal que solo Yo puedo protegerlos. Sean pacientes por un breve reinado del mal, y luego regresaré para derrotar a estos malvados mientras los arrojaré al infierno. Entonces estableceré Mis nuevos cielos y nueva tierra en Mi Era de Paz.”

Jesús dijo: “Mi gente, han estado disfrutando de los hermosos relatos de Pascua en los Hechos de los Apóstoles. La primavera y las nuevas flores están haciendo su aparición, ya que la naturaleza también está celebrando Mi mensaje de Pascua. Esta es una estación alegre, pero Mis apóstoles ahora tuvieron que salir y predicar Mis Buenas Noticias a todas las naciones. Este es Mi llamado también para todos Mis fieles para compartir su fe con los demás. También se les llama a tender la mano y ayudar a los necesitados, ya sea a sus familiares, amigos o incluso a extraños. Estas son buenas obras de misericordia para ayudar a alguien a mudarse o arreglar algo en sus casas. Cuando dan espontáneamente su tiempo y dinero, están mostrando cuánto aman a su prójimo, y están haciendo esto por amor a Mí en ellos también. Las oportunidades de gracia ayudarán a acumular tesoros en el cielo para su juicio. Les doy a todos la oportunidad de ayudar a los demás por caridad para demostrar que no son egoístas y solo se preocupan por sí mismos. Tienen su propio trabajo y cuidar su supervivencia, pero en otros momentos pueden hacer espacio en su horario para ayudar a los demás. Programar prioridades para su vida de oración, vida familiar y vida laboral son todos importantes, pero aún debería ser el centro de su vida. Sean alegres todos los días y compartan esa alegría con todos aquellos que conozcan en la vida.”