YO FUI EL DIOS DE LA JUSTICIA, EN EL ANTIGUO TESTAMENTO.

FUI EL DIOS DE LA MISERICORDIA Y DEL PERDÓN EN EL NUEVO TESTAMENTO. ADEMÁS, PARA ESTOS TIEMPOS, SERÉ EL DIOS DE LA MISERICORDIA, PERO TAMBIÉN SOY EL DIOS DE LA JUSTICIA.

MISERICORDIA PARA LOS QUE ESCUCHEN MI VOZ Y CUMPLAN MIS PRECEPTOS. JUSTICIA PARA TODOS LOS QUE NO ME ESCUCHEN Y NO CUMPLAN MIS PRECEPTOS.

CORAZÓN ABIERTO Y CORAZÓN ABIERTO PARA LOS QUE ME ESCUCHEN Y ME SIGAN

BRAZO EXTENDIDO Y MANO FUERTE PARA TODOS LOS QUE DESCUIDAN ESCUCHARME Y CUMPLIR MIS PRECEPTOS

QUE ESTO QUEDE MUY CLARO

VUESTRO PASTOR OS AMA

JESÚS DE NAZARET"

Hermanos: Que la paz de Dios esté con vosotros.

Soy Enoch. Por la misericordia de Dios he sido elegido para dar a conocer al mundo los Mensajes de Salvación del Buen Pastor, antes de que lleguen los tiempos de tribulación.

Estos mensajes son un llamamiento aguileño de Jesús, el Buen Pastor, a la humanidad, invitándola a convertirse. Son campanas de misericordia que suenan, antes de que llegue el "Juicio de las Naciones".

Hermanos: Jesús, el Buen Pastor, no quiere la muerte de los pecadores, sino que se conviertan y alcancen la alegría de la vida eterna. Por eso, como Buen Pastor, llama a sus ovejas sin distinción de credo o religión; nos dice en Su palabra: "He aquí que estoy a la puerta y llamo. Si alguno oye mi voz y me abre la puerta, entraré en su casa, cenaré con él y él conmigo". (Ap. 3.20).

Hermanos: Jesús, el Buen Pastor, quiere entrar en vuestro corazón y en vuestros hogares. ¡Abridle! No Le cerréis la puerta; Él quiere daros la vida eterna. El tiempo de la Justicia de Dios está a punto de comenzar, y ella, Su Justicia, sólo conoce el bien y el mal profundos.

Por tanto, recapacitad, hermanos; meditad y poned en práctica estos mensajes y, lo que es más importante, dadlos a conocer al mundo entero, para que vosotros también seáis pastores y mensajeros del amor.

Jesús Buen Pastor quiere una gran cruzada mundial, pues el tiempo apremia y está en juego la salvación de las almas.

Estos mensajes son reconocidos por la Iglesia como Revelaciones Privadas.
Jesús y María os bendicen y os conceden la gracia de ser habitantes de la Nueva Jerusalén Celestial.

Enoc

Su Santidad el Papa Pablo VI ha confirmado el 14 de octubre de 1966 el Decreto de la Sagrada Congregación para la promulgación de la Fe(Acta Apostolicae Sedis nº 58/16del 29 de diciembre de 1966) que permite la publicación de escritos relativos a las manifestaciones sobrenaturales aunque estos escritos no estén aprobados por el "nihil obstat"de las Autoridades Eclesiásticas.